La vicepresidenta Cristina Kirchner se mantiene en silencio.

Más allá de su asistencia al Senado, aún no definió cuándo será su primera declaración pública tras el atentado que padeció hace una semana en la puerta de su casa.

De acuerdo al presidente del bloque oficialista en ese cuerpo, José Mayans, la exmandataria le confió:

“Estoy bien, pero hay un esquema de violencia que me preocupa”.

En los últimos días, la titular del Senado mantuvo contactos directos con dirigentes de su círculo íntimo, a quienes les transmitió sus sensaciones ante el violento episodio.

Mayans relató que le preguntó a la expresidenta si en el momento del ataque se había dado cuenta que había sido apuntada con un arma de fuego:

"No vi absolutamente nada. Yo lo que vi, porque las personas en la tercera línea, suelen pasar los libros, arrojarlos, para que yo pueda firmarlos, y una persona me arrojó el libro”, expresó Cristina, de acuerdo a Mayans.

“En ese momento, me tomo la cabeza y digo `Uy´, por eso me agaché, pero en ningún momento me di cuenta”, prosiguió la vicepresidenta.

Y añadió: “Entonces ahí me toman, me dicen `tenemos que salir´ y me subo al auto y saludo a la gente y cuando voy para arriba, ahí me dijeron que me quisieron matar”.

“Cuando veo las filmaciones realmente me impactaron, me pusieron muy triste. Que una persona me quiera dañar de esa forma, que me quiera matar, a uno lo conmociona”, resaltó Cristina Kirchner, según Mayans.