La inflación de junio fue de 5,3 por ciento. La impulsaron los precios de los alimentos, la salud y los gastos de alquiler y mantenimiento de la vivienda, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
La variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) trepó sobre las expectativas del Gobierno. Es que el Ejecutivo esperaba anunciar un retroceso del costo de vida en junio, con relación al 5,1 por ciento que se registró en mayo.
De este modo, el primer semestre de 2022 cerró con un aumento de precios minoristas del 36,2 por ciento. En tanto, el incremento interanual fue de 64 por ciento, el más alto en tres décadas.
El IPC de junio rompió la desaceleración que mostraba la tasa de inflación desde el pico de 6,7 por ciento de marzo, tras descender a 6 por ciento en abril y 5,1 por ciento en el período siguiente.
