En el marco de las declaraciones indagatorias, dos de los tres policías de la ciudad acusados por el asesinato del joven Lucas González reconocieron haber disparado contra el auto en que viajaba la víctima junto con tres amigos.
Los acusados relataron que se bajaron del Nissan Tiida de la División Sumarios y Brigadas de la Comuna N° 4 al grito de “policía” y con los chalecos de identificación puestos. También, aseguraron que hicieron sonar la sirena, aunque no encendieron las luces superiores porque no funcionaban, según detallaron fuentes de la Justicia.
En tanto, ninguno de los tres dijo haber visto armas en poder de las víctimas. En adelante, el juez tiene diez días para resolver las situaciones procesales de los imputados, mientras se aguardan las declaraciones de algunos testigos, así como los resultados de diversos peritajes.
El asesinato fue cometido el miércoles 17 cuando Lucas y sus tres amigos salieron del club Barracas Central y fueron interceptados por los policías, de quienes intentaron huir al interpretar que se trataba de un asalto.
